Conservación de la Península

Baja California, México es la segunda península más larga del mundo. Cuenta con muchos ecosistemas diferentes y alberga una gran variedad de flora y fauna. Muchas de las especies son endémicas, o sea, no se encuentran en ningún otro lugar del mundo. En este sección, aprenderás más sobre la península y las maneras en que se protegan sus recursos únicos.

Encontrarás los enlaces a los materiales didácticos utilizados en las clases de ISSI (por sus siglas en inglés: el Instituto Veraniego de Español Intensivo) aquí y en los archivos. También puede ir la lista de vocabulario para este tema o ver la traducción en inglés haciendo clic en las palabras individuas rojas abajo en el texto.

La península de Baja California mide 760 millas (1267 km) de largo y tiene una superficie de 89,100 millas cuadradas (23.076.793 hectáreas). Cuenta con casi 2.000 millas (3332 km) de orilla y está rodeado por el Océano Pacífico al oeste y el Golfo de California (El Mar de Cortés) al este, donde abunda la vida marina. Su historia geológica ha dado como resultado un medio ambiente único y variado que cuenta con una amplia variedad de los hábitats y un alto nivel de biodiversidad.

Mientras más de 60 por ciento del territorio de la península se encuentra dentro del Desierto Sonorense, también se puede encontrar unos manglares y bosques áridos tropicales en el sur además de montañas nevadas con bosques de pino en el noreste. En el Golfo se encuentra el arrecife de coral más septentrional en las Américas, mientras tres sistemas lagunares pacíficos forman unos refugios y viveros para las ballenas grises de California (Eschrichtius robustus) en el punto más meridional de su ruta migratoria anual.

Cave painting at San BorjitasA través de los llanos vastos y, por la mayor parte deshabitados, del Desierto de Vizcaíno, vagan una población pequeña de una subespecie endémica de antílope conocido como el berrendo (Antilocapra americana ssp. peninsularis). Los vestigios de otra especie protegida, el borrego cimarrón (Ovis canadensis ssp. nelsoni) ya son restringidas a los pendientes de las Sierras de: San Borja, San Francisco, Guadalupe, La Giganta y el complejo del Volcán de las Tres Vírgenes.

Solo quedan pocas poblaciones restantes de las culturas indígenas originales (Kumiai, Paipai, Cocopa y Kiliwa del norte de Baja California, y los Cochimí, Guaycura y Pericú de las regiones meridionales). Sin embargo, actualmente hay un resurgimiento por los descendientes de las tribus de reclamar y rescatar sus raíces y culturas indígenas. Los rasgos indelebles de los habitantes de la península siguen siendo evidentes en los centenares de sitios de arte rupestre distribuidos por la península. El arte rupestre bajacaliforniano alcanzó su máxima forma estilística en la región central, donde las pinturas rupestres en el estilo de Gran Mural, pueden tener al menos 7 mil 500 años de edad, y adornan cuevas y abrigos rocosos aislados de las sierras.

Desert scene, southern Baja CaliforniaPor su mayor parte, la península es un lugar áspero, deshabitado, con poca agua y con muchas especies nativas de flora y fauna, todas que son bien adaptadas a su entorno actual. Es este soledad y paisaje salvaje que han atraído a tantos visitantes a la península desde el Siglo XIX, muchos de ellos que buscaban las riquezas monetarias, científicas y espirituales. Otros que llegaron buscaban las aventuras o quería colonizar la nueva frontera. Ironicamente es la naturaleza pristina y el aislamiento que han seducido a tantas personas a la vez que han ocasionado la creciente explotación de los recursos naturales y su degradación medioambiental.

.

Las Áreas y Especies Protegidas

La Península de Baja California cuenta con una amplia variedad de áreas naturales protegidas (las ANP) decretadas por el gobierno, inclusive cuatro parques nacionales (dos marinos y dos terrestres), algunos santuarios de vida silvestre y cinco Reservas de la Biósfera. De la última clase, la Reserva del Desierto El Vizcaíno es uno de las áreas protegídas más grande de Latinoamérica. El Vizcaíno también es un Sitio del Patrimonio de la Humanidad, reconocido por la UNESCO debido a sus pinturas rupestres, santuarios de la ballena gris, el berrendo y el borrego cimarrón. El 27 de junio de 2014 fue decretado una nueva Reserva de la Biósfera en las Sierras de la Giganta y de Guadalupe, pero el proceso falta mucho por terminar. Lee más sobre estas noticias aquí. Visita el sitio de CONABIO para una lista completa de las ANP en la península y México.

Reservas de la Biósfera

  1. Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado, Sonora/BC
  2. Vizcaíno, BCS
    1. Complejo Lagunar de Ojo de Liebre
    2. Laguna San Ignacio
    3. Sierra San Francisco
  3. Sierra de la Laguna, BCS
  4. Isla Guadalupe, BCN
  5. Reserva de la Biósfera Bahía de los Ángeles, Canales de Ballenas y de Salsipuedes

Parques Nacionales

  1. San Pedro Mártir, BC
  2. Constitución de 1857, BC
  3. Archipiélago de San Lorenzo, BC
  4. Bahía de Loreto, BCS
  5. Bahía de Cabo Pulmo, BCS
  6. Archipiélago de Espíritu Santo

Áreas Naturales Protegidas (ANP)

  1. Islas del Golfo de California,BC/BCS/Sonora
  2. Valle de los Cirios
  3. Las Cascadas de Arena&el Estero San José del Cabo
  4. Balandra
Baja ANPs

Además del berrendo, borrego cimarrón, y la ballena gris, hay algunas otras especies amenazadas en la península que son protegidas por ley federal: cinco de las siete especies de tortugas marinas que se alimentan o anidan en las aguas o playas de la entidad; y varias otras especies de ballena (ej., azul, jorobada, de aleta) que viven en las aguas de la zona. Hay especies de plantas y sus hábitats que son protegidos por ley federal también: más de 100 especies de cactus, alrededor de 80 por ciento endémicas y encontradas en ningún otro lugar en el mundo; y los bosques de manglar y partes del bosque árido tropical de la Región de los Cabos.

La protección al medio ambiente tiene una larga historia en México y la conservación de la península ya estaba bastante avanzada para los años 1970 con el establecimiento del santuario de las ballenas grises en la costa pacífica.

Las leyes ambientales mexicanas, que incluye la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección Ambiental aprobada por la primera vez en 1988 (y revisadas en 2001 y 2010), son unas de las leyes más fuertes y ambiciosas del mundo. Sin embargo, como todas las leyes, su eficaz depende de la voluntad del gobierno y su habilidad de aplicar y hacer cumplir los reglamentos y normas, y de la influencia del sector comercial y los gobiernos locales para ignorar o impedirlos.

Save the gray whaleUna amplia variedad de grupos locales e internacionales sin fines de lucro (ONGs) se han incorporado para enfrentar las cuestiones de conservación y han seguido siendo instrumentales en la conservación de la península salvaje y su flora y fauna.  En todos los sectores (los niños o adultos, grupos pequeños informales de apoyo popular o prestadores de servicios, y aún grupos ecológicos binacionales bien dotadas) su participación ha sido sumamente importante para identificar los problemas y buscar las soluciones que beneficien tanto el medioambiente como los intereses económicos de las comunidades involucradas. En mayo de 2011 en Loreto, más de 300 científicos, líderes de los ONG y oficios del gobierno se reunieron en el primer Simposio de la Ciéncia de la Conservación donde discutieron cómo se puede aplicar la ciencia a la conservación y manejo de los recursos naturales de la península y a lo largo del Golfo de California

World turtle logoLa intersección de los dependientes gubernamentales con las empresas del sector privado y las organizaciones civiles locales ha resultado en: un programa de captura, reproducción en cautiverio y liberación que pretende aumentar el número de los berrendos; un programa para la conservación y manejo sustentable del borrego cimarrón que utiliza la cacería estrictamente regulada para mantener una población sana y recaudar los fondos necesarias para manejar el mismo programa y educación ambiental; un gran número de viveros para las tortugas marinas donde se liberan miles de tortuguitas cada año; la protección permanente de los santuarios de ballenas grises frente la presión del desarrollo industrial en sus afueras; y un aumento generalizado del ecoturismo en la península.  Aunque existen problemas a lo largo de la península, como la falta de fondos gubernamentales suficientes para aplicar la ley o algunos programas que parecen tener resultados cuestionables, la tendencia general es positiva con todos los sectores reuniéndose para buscar soluciones creativas.

Arriba