WWW.MELONCOYOTE.ORG
Periodismo Para Elevar la Conciencia Ecológica
Boletín Ciudadano Sobre el Desarrollo Sustentable del Noroeste Mexicano
DIRECTORIO
Colaboradores en este número
Portada
Soledad Lojd
Comentario
Juana Meraz
Edith González
Eva Terán
Leticia López
Periodismo Ambiental
Talli Nauman
Agustín del Castillo
Baja California
Alan Alexis Valverde Amador
Kent Paterson
Arizona
Talli Nauman
Sonora
Rosa María O Leary
Isabel Dorado
Sofía Vargas
Nayeli Salcido
Sinaloa
Raquel Zapien
Nayarit
Ernesto Bolado
Baja California Sur
Debra Valov
Regional
Kent Paterson
Fabian Carvallo
Consejo Editorial
Talli Nauman (San Ignacio, B.C.S.)
Debra Valov (Mulegé, B.C.S.)
Griselda Franco Piedra (Guaymas, Son.)
Asesores Vol. 9, No. 1
Ernesto Bolado
Dahl McLean
Traducciones Vol. 9, No. 1
Debra Valov
Tracy Barnett
Gloria Wilson
Lis Maria Arévalo Hidalgo
Scott Powell
Agradecimientos
Lasecomujeres.org
SuMar - Voces por la Naturaleza
Proyecto Esperanza
Red Mexicana de Periodistas Ambientales
Diseño
Debra Valov; Mulegé, B.C.S.
Contacto
meloncoyote [arroba] gmail.com
Facebook
Melóncoyote es un producto de Periodismo para Elevar la Conciencia Ecológica (PECE), un proyecto independiente de comunicación fundado en 1994 con el apoyo de la Fundación MacArthur.
Los puntos de vista de los autores son responsabilidad propia.
Se autoriza la reproducción total o parcial de los textos, ilustraciones y/o contenidos, citando a los autores y a la publicación.
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El amor al arte en tiempos de Covid-19
El codirector de Periodismo para Elevar la Conciencia Ecológica, Miguel Ángel Torres Guerrero (1956-2019), nos dejó con la tarea de publicar por lo menos un número más del boletín Meloncoyote. Cumplir con su último deseo es el propósito de la presente edición, misma que ofrecemos aquí, por amor al arte.
La publicación se cruzó con el brote mundial de la nueva enfermedad viral Covid-19, una pandemia que llevó al cierre de la frontera internacional que une nuestra región del Noroeste mexicano con los estados vecinos de Arizona y California.
Con ello, el panorama era incierto para las reuniones familiares, el turismo, las actividades del campo, los negocios, los servicios, la cooperación ambiental en el área fronteriza, y demás. Con las escuelas públicas cerradas temporalmente, asimismo, para proteger la salud, nuestro taller de Meloncoyote sobre Periodismo ciudadano bilingüe de investigación para la resiliencia fue pospuesto hasta nuevo aviso por el Colegio de Bachilleres III en Ciudad Obregón, Sonora.
Anteriormente, en el encuentro editorial de 2019, celebrado en la Ciudad de México en noviembre, dialogamos sobre los cambios en la industria de comunicación masiva en el lapso de los 15 años del proyecto del boletín. Con el advenimiento de los medios sociales y la edad de información por internet, la publicación ya no es el único medio de cobertura de sustentabilidad en nuestra región. Sin embargo, concluimos, su utilidad como herramienta de capacitación para el periodismo de investigación independiente es tan invaluable como siempre.
Las/os compas de la Red Mexicana de Periodistas Ambientales invitadas/os a la reunión se comprometieron a contribuir artículos al boletín, a manera de hacerle tributo a su amigo Miguel Ángel, quien fue uno de los fundadores de la organización nacional.
Sin embargo, como en los años anteriores, la buena voluntad de las/os corresponsales terminó siendo rebasada por sus otros deberes, haciendo que la redacción se volviera tardada y pesada.
La falta de subvenciones para gastos de producción desde 2015 agravó los desafíos para el taller y la publicación. El resultado de esta secuencia de eventos es que Meloncoyote se planea publicar sólo en relación con futuros talleres, con el propósito de garantizar que las y los participantes en las sesiones de capacitación todavía tendrán un foro en donde difundir sus productos mediáticos. Mientras tanto, mantendremos nuestra presencia a través de actualizaciones a nuestra página en red social @meloncoyote.
Agradecemos a nuestras/os voluntarias/os talentosas/os y trabajadores, así como a nuestras otroras fuentes de apoyo financiero. Estamos orgullosos de nuestro historial y esperamos más éxitos a futuro para las generaciones actuales y por venir en cuanto a su participación en la conservación del Noroeste.
¿Por qué el Melóncoyote?
Al arrancar el primer proyecto de periodismo ciudadano de la región de El Golfo de California, en 2005, nuestro equipo escogió el nombre de Melóncoyote porque es una especie emblemática de las tierras en que desempeñamos nuestra misión.
El melóncoyote (Cucurbita palmata, C. cordata, C. digitata o C. foetidissima), también conocida como calabacilla, es una planta silvestre, perenne, resistente, versátil, bella, útil y nativa de los suelos arenosos que caracterizan la región de El Golfo de California. Se encuentra en siete estados y dos países: Baja California Sur, Baja California, Sonora, Sinaloa y Nayarit, en México; y California y Arizona en los Estados Unidos.
Los y las lugareños indígenas y campesinos que portan la sabiduría tradicional nos dicen que en su uso como medicina es amarga pero efectiva; como instrumento musical, sirve de sonaja; como alimento, sus semillas proveen de harina y aceite con alta cantidad de proteína; y su cáscara es ideal para guardar “tiliches”. Es parte integral de la cadena alimenticia, ya que toma su nombre del hecho de que los coyotes la comen, y también nutre a la jabalina y el puerco espín. Tiene una raíz inmensa que le garantiza la sobrevivencia contra el mal tiempo, mientras sus largas enredaderas sirven de anclas para la tierra en áreas frágiles.
El equipo hizo énfasis en su intención de crear un medio de comunicación masiva, capaz de difundir los esfuerzos para el desarrollo sustentable a nivel regional, al escoger el nombre de Melóncoyote, porque se encuentra la especie en toda la zona. Con ella como nombre y logotipo, damos una clara señal, además, de nuestro respeto para los detalles del territorio y los mares, así como las culturas ancestrales y las costumbres de la región.
Vemos el establecimiento de este medio de capacitación y difusión como algo urgente dada la idiosincrasia de la región. Nos concebimos como un elemento del entorno, positivo como es el melóncoyote, ante los retos del crecimiento de la región: su densidad poblacional baja, reciente incorporación política a la estructura nacional gubernamental, alta atracción natural, y proximidad al sector fuerte de inversión estadounidense. Entendemos que todo esto implica fuertes presiones de desarrollo que requieren de habitantes informados, con la posibilidad de participar en las decisiones que afectan su tierra, agua, aire, tesoro de biodiversidad y futuro. Invitamos a otros ciudadanos a unirse con nosotros a participar en la construcción de este medio y por un futuro estable para la región.
Los antecedentes del proyecto datan de 1994, cuando se formó Periodismo para Elevar la Conciencia Ecológica, PECE, un primer intento de su tipo, que después participó en la fundación en 2004, de la organización nacional gremial de la Red Mexicana de Periodistas Ambientales.
Todo el trabajo del Melóncoyote es voluntario.